Tras cuatro años de los feminicidios de dos mujeres, madre e hija, en el municipio de Acajete, Alonzo N. fue sentenciado a 70 años de prisión, además de que tendrá que pagar 173 mil 760 pesos por daño moral y 208 mil 500 por daño material.
A través de un comunicado, este lunes 25 de marzo se dio a conocer que la pena que le dictaron al feminicida que privó de la vida a Gardenia, de 26 años de edad, y a su hija Dulce Dayann de 11, dentro de un vehículo en la localidad de Santa María Nenetzintla, del municipio de Acajete.
Feminicidio de madre e hija en Acajete
El hecho ocurrió el 11 de junio de 2020, cuando Alonzo N. agredió físicamente a su expareja sentimental y a la hija de ella, al interior de su negocio en San Jerónimo Ocotitlán.
Después de ello, el agresor subió a las víctimas a un vehículo Suzuki Swift en el que las trasladó a un ejido de Nenetzintla donde le prendió fuego a la unidad, ocasionando la muerte de ambas víctimas.
Los cuerpos de las mujeres fueron localizados un día después del femicidio, por los vecinos de Nenetzintla, quienes hallaron el carro, en un paraje cerca del panteón municipal, completamente calcinado.
El cuerpo de la mujer de aproximadamente 26 años de edad, estaba amarrado al asiento, mientras que el cadáver de la menor se encontrada al interior de la cajuela.
Fueron reconocidas como miembros de la Iglesia Adventista del Séptimo Día (IASD), de la localidad de La Magdalena Tetela, también en Acajete.
En ese año se realizó una protesta por las principales calles de la Magdalena Tetela para exigir castigo al criminal, 4 años después se obtiene justicia
Al grito de “justicia para Gardenia y Dulce”, lun grupo de mujeres realizó una marcha en protesta por el feminicidio de madre e hija quienes fueron calcinadas por su verdugo.
Desde la casa de Gardenia y Dulce, ubicada en la 5 Norte, marcharon cerca de 100 mujeres a lo largo de cinco calles hacia el zócalo de la junta auxiliar dónde se colocó un altar y una lona frente la presidencia auxiliar. La manifestación recorrió las principales calles de la Magdalena Tetela, Acajete y en ella participaron amigas, familiares y otras féminas que exigieron castigo para el responsable del crimen.
