
Durante su visita al estado de Puebla ayer domingo, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo fue recibida con una protesta por parte de trabajadores del sector salud que exigieron la basificación de más de 3,600 empleados que llevan entre cinco y hasta quince años sin plaza. Ante las consignas de “¡basificación!” y pancartas donde se leían mensajes como “seguimos olvidados”, la mandataria federal se comprometió públicamente a regularizar las plazas pendientes del IMSS-Bienestar.
“Estamos haciendo un trabajo muy intensivo con el IMSS-Bienestar, el objetivo es regularizar todas las plazas que todavía nos quedan pendientes para que sean integradas”, aseguró desde el templete.
Los manifestantes, entre ellos médicos, enfermeras y camilleros, denunciaron que desde la pandemia de Covid-19 se les prometió certeza laboral, pero hasta la fecha sobreviven con sueldos precarios —algunos de apenas 1,500 pesos semanales— sin seguridad social ni estabilidad.
El delegado de la Secretaría de Gobernación en Puebla, Mario Rincón González, también acudió al sitio para escuchar las demandas y se comprometió a abrir un canal de diálogo con autoridades estatales.
Por su parte, José Alfredo Méndez, uno de los voceros de los trabajadores afectados, expuso que han tenido múltiples reuniones sin resultados.
“Nos pidieron estar al frente del Covid y lo hicimos; ahora, después de años, no tenemos plaza ni respuestas claras”, denunció.
Según el director del IMSS-Bienestar en Puebla, Gerónimo Lara Gálvez, aún faltan por autorizar 2,900 plazas, y la regularización depende de la liberación de recursos por parte de la Secretaría de Hacienda.
El descontento se ha extendido, y para el próximo miércoles 11 de junio, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) sección 25 ha convocado una marcha y toma de instalaciones del IMSS-Bienestar y la Secretaría de Salud, para exigir soluciones ante la crisis de insumos, la precariedad laboral y el desabasto de medicamentos.
Inaugura Sheinbaum torres de Oncología y Cardiología con inversión histórica

En medio de este contexto, Sheinbaum también encabezó la inauguración de las torres de Oncología y Cardiología del Hospital para la Niñez Poblana, una obra que representó una inversión de 915 millones de pesos y que ampliará significativamente la capacidad de atención especializada.
Acompañada del gobernador Alejandro Armenta Mier, del director general del IMSS-Bienestar, Alejandro Svarch Pérez, y funcionarios federales, la presidenta destacó que estas nuevas áreas dotan al hospital de una infraestructura de primer nivel, comparable con cualquier otro centro médico internacional.

“La salud no debe ser un privilegio ni una mercancía. Es un derecho constitucional y vamos a garantizarlo”, afirmó.
Las dos nuevas torres permitirán duplicar la atención oncológica, pasar de 227 a más de 560 cirugías cardíacas anuales, y aumentar de 4,195 a más de 14,000 consultas. También se incrementará la capacidad hospitalaria con 142 camas censables, 145 no censables, 52 consultorios y 7 quirófanos, así como un equipo médico que supera el millar de trabajadores.
Sheinbaum también anunció dos programas prioritarios para fortalecer el sistema de salud:
- “Salud Casa por Casa”, con más de 20,000 profesionales que recorrerán el país para atender a los 13 millones de adultos mayores con visitas médicas mensuales o bimestrales.
- Farmacias del Bienestar, para garantizar el abasto gratuito de medicamentos en todo el país.
Por su parte, el gobernador Armenta agradeció la visita de la presidenta y afirmó que la inversión en el Hospital de la Niñez es una muestra clara del compromiso con el bienestar de los poblanos.