El 14 de junio de cada año se celebra el Día Mundial del Donante de Sangre para agradecer a los donantes voluntarios no remunerados y hacer conciencia sobre la importancia de donar para garantizar la calidad, seguridad y disponibilidad de sangre.
La sangre posee los siguientes componentes sanguíneos:
• Glóbulos rojos: transportan el oxígeno y ayudan a eliminar los desechos.
• Glóbulos blancos: ayudan al organismo a combatir infecciones.
• Plasma: parte líquida de la sangre, sirve para transportar células, nutrientes y otros elementos del sistema inmunológico.
• Plaquetas: permiten la adecuada coagulación de la sangre.
Las transfusiones de sangre y sus productos ayudan a salvar millones de vidas en el mundo y contribuyen a que pacientes con enfermedades potencialmente mortales vivan más tiempo con mejor calidad de vida, también posibilitan la realización de intervenciones médicas y quirúrgicas complejas.
Asimismo, tienen una función vital en la atención maternoinfantil, el embarazo y las respuestas de emergencia a los desastres naturales o causados por el hombre.