El Día Mundial del ARN (ácido ribonucleico) es una fecha especial que se celebra cada 1 de agosto para concienciar sobre la relevancia de esta molécula en la generación de proteínas y su importancia para la vida en el organismo.
El ARN es un pariente cercano del ADN (ácido desoxirribonucleico) y junto con las proteínas, son las tres principales moléculas biológicas esenciales para el funcionamiento de los seres vivos. A lo largo de décadas de investigación científica, se ha profundizado en el conocimiento del ARN y se han encontrado diversos usos terapéuticos para su aplicación en la salud humana.
El ARN está compuesto por una cadena simple de ribonucleótidos que contienen ribosa, un fosfato y una base nitrogenada (adenina, guanina, citosina y uracilo). Esta molécula está presente en todas las células vivas que tienen similitudes estructurales con el ADN. Además de transportar información copiada del ADN, el ARN juega un papel vital en la fabricación de proteínas, las cuales son fundamentales para todos los procesos biológicos.