Desde el 2007 se conmemora esta fecha en todo el mundo de manera coincidente con el aniversario del nacimiento de Hans Asperger, psiquiatra austriaco que describió por primera vez el síndrome.
Hoy es la celebración del Día Internacional del Síndrome de Asperger, este día tiene como objetivo dar a conocer este trastorno del espectro autista (TEA), que afecta de 3 a 5 recién nacidos por mil. Lo más importante es mostrar la verdadera situación de las personas diagnosticadas. En nuestro caso, los niños suelen ser invisibles para la sociedad.
¿Qué es el sindrome de Asperger?
El trastorno debe su nombre al pediatra, investigador y profesor de medicina austríaco Hans Asperger, quien en 1944 denominó por primera vez el trastorno como “psicopatía autista”.
El síndrome de Asperger es un trastorno del desarrollo, incluido en el espectro del autismo, que afecta la interacción social mutua, la comunicación verbal y no verbal, la negación a aceptar cambios, el pensamiento rígido y áreas de interés estrechas y absortas.
Las personas con este síndrome suelen ser excelentes en memoria (datos, números, fechas, horas, etc.) y muchas de ellas son excelentes en matemáticas y ciencias. La gravedad de los síntomas del síndrome tiene un cierto rango, y los niños que están levemente afectados generalmente no son diagnosticados y pueden verse extraños o diferentes.
A pesar de que el síndrome de Asperger es más común que otros tipos de autismo, todavía es una enfermedad rara. Pocas personas, incluidos los profesionales, lo saben, y muy pocas personas tienen una experiencia confiable. Parece afectar más a los niños que a las niñas (esta propuesta se encuentra actualmente en plena discusión científica).
En general, les resulta difícil hacer amigos y no comprenden las pistas necesarias para hacerlo. Usan el lenguaje de una manera un tanto extraña y, a menudo, obtienen un significado literal de lo que leen o escuchan.
Características de los niños con Asperger
Recordamos que no todas las personas con enfermedad de Asperger tienen las mismas características y la gravedad de los síntomas varía. Los niños con síndrome de Asperger son niños con apariencia e inteligencia normales, a veces incluso por encima del promedio.
A pesar de tener patrones de comportamiento comunes que se relacionan principalmente con dificultades relacionadas con otros, aún pueden ocurrir múltiples síntomas.
Las personas con la enfermedad de Asperger pueden ser tranquilas, tímidas y muy retraídas, pero también pueden ser extrovertidas y de caracter fuerte.
Muchos niños levemente afectados con Asperger pueden ser considerados “raros” o “excéntricos” (que no lo son, simplemente son diferentes) y no ser diagnosticados, pero en líneas generales podemos mencionar los siguientes síntomas.
Síntomas más habituales en niños con Asperger
- Problemas en el lenguaje: a pesar de tener una adquisición del habla normal y que puede expresarse con un vocabulario extenso y elaborado, suelen tener dificultad en el ritmo de conversación, así como frecuentes alteraciones en la entonación, volumen, timbre de voz, etc…
- Problemas para la interacción social, especialmente con personas de su misma edad: no le gusta jugar en grupo o no entiende las reglas, no soporta no ganar.
- Interpretación literal del mensaje: no entienden la ironía, ni el doble sentido, ni las sutilezas del lenguaje.
- Patrones disfuncionales de contacto ocular (algunos no miran a los ojos al hablar), gestual, etc.
- Intereses restringidos: les interesan pocas cosas y lo que les interesa, les interesa mucho. Desarrollan intereses muy específicos por temas particulares, a los que dedican mucho tiempo y buscan datos de forma casi exclusiva. Por ejemplo, los números, vehículos, mapas, clasificaciones ligueras o calendarios. Y hablan mucho sobre el tema que dominan.
- Dificultades para la abstracción de conceptos.
- Dificultades en la coordinación motriz: puede tener dificultades para ponerse las zapatillas o la ropa, o poca destreza para atrapar una pelota, abrocharse los botones o destacar por un ritmo extraño al andar o correr.
- Inflexibilidad, tanto a nivel cognitivo como de comportamientos que repiten sin ninguna variación.
- Dificultades en la interpretación de los sentimientos y emociones ajenos y propios.
- Resistencia para aceptar el cambio: la rutina y la planificación les aporta seguridad.
Extremadamente buenos en las habilidades de memoria (hechos, figuras, fechas, épocas, etc.). Muchos sobresalen en matemáticas, ciencia y asignaturas lógicas.
Pueden presentar Transtornos del Procesamineto Sensorial , generalmente de tipo auditivo y visual. También pueden ser especialmente sensibles a determinadas texturas.